La nueva versión de la EPBD, que ha salido adelante el martes 12 de marzo de 2024, en el pleno del Parlamento, con 370 votos a favor, 199 en contra y 46 abstenciones, sienta las bases del proceso para descarbonizar la edificación antes de 2050. El texto aporta una serie de instrumentos -como el registro digital, el pasaporte de renovación o la nueva certificación energética europea – que ayudarán a los/as profesionales de la Arquitectura a modificar la forma en que se diseña y construye, así como a reconsiderar el mantenimiento y gestión de los edificios a lo largo de todo su ciclo de vida.
Una vez aprobada la directiva, los Estados miembros de la Unión Europea tienen dos años para transponerla a la legislación nacional.
Esta nueva directiva tiene como objetivo la reducción del consumo de energía y de las emisiones de gases invernaderos en el sector de la construcción. Se insta a que todos los nuevos edificios sean climáticamente neutros a partir de 2030, y que, en cuanto a los edificios residenciales ya construidos, reduzcan su consumo de energía primaria un 16% para 2030 y al menos entre un 20 y un 22% para 2035. Además, se pretende la eliminación progresiva de los sistemas de calefacción con combustibles fósiles, retirando las subvenciones a las calderas de combustibles fósiles en 2025.
Puede consultarse la nota de Prensa del Parlamento Europeo y la directiva aprobada a través de los siguientes enlaces:
– Nota de Prensa del Parlamento Europeo.
– P9_TA(2024)0129 Eficiencia Energética de los edificios – Resolución de 12 de marzo de 2024