En el municipio de Madrid han sido cuatro entornos los que han gozado de la selección para el conocido como Programa 1, anteriormente mencionado: Eugenia de Montijo – Colonia de la Prensa y Tercio Terol en Carabanchel es el primero de ellos, Meseta de Orcasitas y Poblado Dirigido de Orcasitas en Usera es el segundo, Poblado Dirigido de Fuencarral en Fuencarral el Pardo, el tercero y Puerto Chico, en Latina, que el caso que nos ocupa en este artículo, el cuarto.
Este programa, que cuenta con fondos exclusivos para estos entornos, y mejora cuantitativamente las ayudas por vivienda, permite renovar barrios que, por su estado de conservación y su contexto socioeconómico, han sido considerados prioritarios por la administración pública.
Estado actual de uno de los edificios del barrio de Puerto Chico (imagen de reBive)
Además, el P1 permite algo relevante a nivel arquitectónico, transcender la escala de proyecto de rehabilitación de edifico individual y pensar una actuación con una mirada de barrio. Esto es importante a la luz de las rehabilitaciones energéticas que se vienen realizando en los últimos años, que, si bien están contribuyendo a reducir consumos energéticos y emisiones de CO2, por la manera en la que se están pensando y ejecutando (por momentos desde una perspectiva puramente eficiencista en lo energético y parca en calidad y ecología de materiales y en riqueza estética), están teniendo un impacto cuestionable en la calidad urbana de la ciudad.
Gracias a un trabajo de años de diversos actores sociales y profesionales en el barrio de Puerto Chico se ha posibilitado hacer efectivo un proyecto con una mirada de barrio y con una serie de características innovadoras que le podrían convertir en referencia y ejemplo de proyectos de regeneración urbana: "Puerto Chico Se Mueve". Los actores principales han sido:
- La Asociación de Vecinos de Puerto Chico, dinamizando el barrio
- El estudio de arquitectura Q-21, concibiendo un ambicioso proyecto de regeneración urbana basado en un diagnóstico bien trabajado y liderando el proceso
- La Federación de Cooperativas de Vivienda y Rehabilitación de la Comunidad de Madrid, poniendo su solvencia y saber hacer como gestor de las ayudas
- El estudio de arquitectura reBive colaborando en el diseño y desarrollo del proyecto.
Gracias a ello se ha logrado que se elija Puerto Chico como uno de estos cuatro entornos. En este sentido, aunque se ha contado con la colaboración de los técnicos del Ayuntamiento de Madrid y del Distrito de Latina para lograr que esta propuesta ambiciosa y compleja cumpliera con todos los condicionantes urbanísticos y transformarse en un modelo a seguir para todo el barrio, se hace necesario en este tipo de proyectos de gran calado un mayor apoyo institucional, que consiga dinamizar a los habitantes y motivarles a embarcarse en un proceso que, si bien es complejo, tiene un enorme impacto sobre su confort, habitabilidad y resiliencia energética. Es relevante destacar cuatro aspectos en los que este proyecto ha sido realmente innovador.
Imagen del proyecto planteado para la rehabilitación de viviendas en el barrio de Puerto Chico (imagen de reBive)
1. INNOVACIÓN SOCIAL
Este barrio de 4.800 viviendas, se construyó en los años sesenta bajo un mismo proyecto arquitectónico. Eran viviendas para albergar a la creciente clase obrera que llegaba a la capital en esos años, y contaban con una gran terraza a lo largo de toda la fachada de cada vivienda. Con el tiempo, esas terrazas fueron colmatándose de manera informal de formas y materiales muy diversos, situación que generó la particular imagen actual del barrio, y no pocas deficiencias en los edificios. También naturalizó la idea, entre los habitantes, de que cada cual personalizaba y adaptaba una vivienda, a priori estandarizada, a medida de su gusto y necesidad.
Así pues, el proyecto de rehabilitación que se propusiera tenía que cumplir con un doble desafío, solventar y regularizar la situación urbanística de esas terrazas, y a su vez, conservar la cualidad de proyecto adaptable e individualizable. Esto se logró ideando una especie de sistema de fachada por módulos funcionales que pudiera componerse en diversas combinaciones para dar respuesta a las diferentes elecciones de los habitantes y que a su vez mantuviera la idea de una fachada armonizada en materiales dimensiones alineamientos, etc.
2. INNOVACIÓN TÉCNICA
Otro reto para el diseño consistía en que estos proyectos requerirían realizarse con los usuarios habitando sus viviendas. Esto llevó a la decisión de utilizar un sistema de industrialización de los diferentes módulos de fachada. Con esto se permitiría ejecutar rápido, mantener los costes razonables, y controlar la calidad de los remates. Para responder a condicionantes urbanísticos y para mejorar la calidad espacial interior de las viviendas, el muro de carga de la fachada original se sustituye por pórticos, completando una verdadera sustitución del sistema completo de fachada original por uno nuevo.
3. INNOVACIÓN ECOLÓGICA
Uno de los objetivos fundamentales del proyecto, y requisito ineludible para las ayudas es la reducción de la demanda energética en más de un 60% y la mejora de 2 letras en la calificación energética del edificio. Esto se hace además con una elección de materiales de bajo impacto ambiental en todo su ciclo de vida, como son la madera, el algodón reciclado, el corcho, la cal, etc. Además, se realiza todo un plan gestión de residuos que conlleva, entre otras cuestiones, la revalorización y reutilización de determinados elementos de la demolición en la propia obra. Estas cuestiones se están desarrollando a través de una asesoría ambiental, con el fin de poder certificar estos estándares y servir de referencia ética para proyectos futuro
4. CALIDAD ARQUITECTÓNICA
Todo lo anterior se ha tratado de integrar en un proyecto, que pretende ser consciente de su impacto urbano y social en la nueva imagen del barrio, y que por tanto se ha diseñado con atención al detalle y al resultado estético, sabiendo el enorme impulso que una actuación de esta naturaleza puede conllevar en la percepción y autoestima de un barrio periférico que cumple 60 años pero que está teniendo una fuerte renovación generacional y tiene ganas de mirar al futuro.
El resultado es una Propuesta de regeneración urbana con un enfoque integral, que aúna lo energético, lo arquitectónico, lo ecológico, lo urbano y lo comunitario, mediante una concertación de los distintos actores involucrados. La primera piedra está puesta, están las oportunidades, el horizonte merece la pena y ahora solo hace falta que poco a poco y, con un buen desempeño de los distintos profesionales, esta ambiciosa intervención pueda irse desarrollando en los próximos años